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Este escrito está dedicado a los amigos de MordiendoLaManzana (www.facebook.com/CanalMordiendoLaManzana).
Tenemos ideas y proyectos que queremos materializar. En nuestra mente muchas veces intentamos concebir la totalidad de los pasos y de la finalización del proyecto.
Imaginamos empezar un restaurante y al cabo de 30 segundos imaginando ya vemos una cadena multinacional de restaurantes por todo el mundo y una sede en Marte. Con la imaginación llegamos más rápido y más lejos de lo que sucede a simple vista; y eso al final nos puede agotar un poco la «lentitud» del mundo.
La rapidez mental nos puede cansar cuando intentamos materializarlo. En nuestra mente vemos unos resultados que no suceden tan rápido y podríamos acabar dejando aparcado nuestro sueño aburridos y cansados.
Así que paso a paso. Te tienes que preparar para tu proyecto.
Para mi sólo hay una pregunta. Una actitud para crear algo para no desesperarte en el proceso es sencilla y a tener en cuenta: ¿Hasta donde puedo hacer hoy?
¿Cual es el siguiente paso a dar? y de hecho vas a darte cuenta que no puedes hacer ninguno más.
Y lo más importante, no sabes dónde va a llevar mañana el paso que estás dando hoy.
No te llenes la cabeza con las posibilidades, puesto que si te dejas guiar y fluyes, va a haber algo mucho más bonito de lo que en un principio te podías imaginar.
Más acorde contigo. Puesto que al igual no quieres el restaurante en Marte, porque los viajes largos no te gustan.
Hoy sabes qué puedes hacer para manifestar un poco más tu objetivo. Nada más. No sabes el paso que se abrirá mañana.
No hace falta que lo tengas todo resuelto. Ni que te preocupes por resolver temas que ahora no están a tu abasto. Olvida los problemas sin resolver, pregúntate: ¿qué puedo hacer hoy?
Hoy sólo puedes dar un paso. Si esperas tener todas las preguntas resueltas antes de dar un paso, tengo la noticia de que nunca vas a hacer nada.
Confía que las dudas que tienes hoy por resolver, ya se resolverán. Conocerás gente que te podrán ayudar, o si no, ya te vendrá la solución.
Pero anda, muévete. Da pasitos para hacer tu sueño.
Y mañana ya se verá. Al igual conoces a alguien, que te abre otro campo de visión que ni tenías pensado. Y entonces, mañana, en vez de imaginar todos los pasos de ese camino, pregúntate: ¿qué puedo hacer hoy?
Cada paso te va a preparar en aptitudes que no tenías, y que son necesarias para aquello que deseas. Desde la forma legal, hasta a encontrar algún socio, las tarifas de precio y las ganancias para que sea rentable y te puedas dedicar a ello. Continúa aunque no lo tengas claro. Se aclarará si te mueves.
El hecho de andar de esta manera, va a hacer que no vas a empezar a hablar con los distribuidores de alimentos, cuando aún no sabes exactamente qué vas a cocinar. Ni vas a hacer márketing tu libro, cuando aun no tienes nada escrito.
Avanzarte al tiempo causa desesperación y agotamiento mental, porque por más que creamos que estamos preparados para nuestro sueño, en la realidad, si queremos que triunfe, nos faltan pasitos a aprender. Claro que vas a estar capacitado para tu sueño, así que hago hasta donde puedo llegar. Por más grande que sea el sueño, siempre hay algo que puedo hacer hoy.
¿Quieres ser presidente del mundo? pues empieza experimentando dones de gente e idiomas.
El paso que das hoy, que es el único que puedes dar, no sabes dónde te va a llevar mañana. Fluye y sé flexible. Con una dirección fija, y siendo inteligente para ir modificándola hacia una nueva versión, a medida que andas.
Dar el primer paso no te va a llevar allí donde quieres, pero te va a sacar de donde estás.
Y allí dónde llegues, andando día a día, vas a alucinar.
Deja de pensar, deja de imaginar. Ponte a la acción
